Barrecha II: El finde
Nunca he tenido los ojos grandes y no pienso hacer juegos de palabras sobre el adjetivo grande, cada cuál lo haga por si mismo (merdê otra juego de palabras). Hoy mis ojos son dos pequeñas líneas. Si me miraras fijamente, entre las pestañas y las ojeras, verías un pequeño espacio blanco y, en su centro, unos ojos. No podrías decidir su color sin acercarte de manera que ambos rompiéramos las leyes de espacios personales, cosa que estaría genial si tuviera menos sueño.
Este finde ha sido intenso. Vamos a ver no he escalado el Teide ni he hecho un viaje a Yugoslavia pero no he parado. El viernes descansé pero el sábado me levante como para ir a trabajar y me vi planteándome que hacer. Después de comprar y perrear un rato quedé por la tarde y ahí empezó todo. Por que salí de mi casa el sábado a las cuatro y, como quién dice, no volví hasta el domingo a las dos (esta información es falsa… volví a mi casa el sabado para deshacer la cama – que no dormir - y no hagan juegos de palabras, para deshacer la cama me sirvo solo).
El sábado tuve un aniversario (si yo dijo aniversario… es una catalanada del copón y me han dicho como 3896735 veces que esta palabra sólo sirve para celebraciones del estilo 25 años de casado… pueden cambiarlo aniversario por cumpleños). Aunque la cantidad de gente invitada era bastante rozando el mucha fue genial (una vez consiguió llegar todo el mundo) y surrealista. El aniversariero disfrutó un montón pese a que perdió el móvil, aguantó que nos sacaran de la discoteca, tuvo que ver como se mancillaba un honor (de un chico... pero vamos que eso nadie lo entendió, aunque el argumentara que era un tema cultural) y teníamos el poder de cerrar todos los sitios que pisábamos. Lo que nadie duda es que será un aniversario que todos recordaremos.
Llegué el domingo a mi casa con el sueño saltado pero cansado lo que me permitió disfrutar una vez más de esas situaciones en que das 4465 vueltas a la cama buscando un posición indefinida. A mi esto me puede. Yo, normalmente, siempre he sido de fácil dormir (si alguien ha activado su chip voyahacerjuegosdepalabras se lo debe estar pasando genial hoy) y cuando no puedo hacerlo con la velocidad que me característica (siga disfrutando, siga) me estreso y mucho. Suerte que había quedado a cocinar y comer y eso me dio la excusa para acabar con mi suplicio. En la comida inventamos una receta (bueno seguramente no) que llamamos Caballo al Cava. Lo mejor de la comida, está claro, la conversación y la compañía.
Acabé el finde con teatro: Pels Pèls. Actores buenos y el estreno de Beth para una comedia americana con miles de representaciones y mucha fama… pero que se basa demasiado el la improvisación y, como su propio nombre indica, se salva por los pelos.
Frase del finde.-
Tengo mi honor manchado.
6 comentarios:
hoy tendrías que haber llamado al trabajo fingiendo una gripe... seguro que estás hecho polvo...
¡¡me alegro que lo pasaras tan bien!!
Oleeee!, que tengas muchos mas asi, jejeje....
Querida
Si el finde ha sido bueno pero hoy tengo menos glamour que un ornitorrinco. Yo quero descansar.
Sueños
Jajajaja No se yo si mi cuerpo aguanta muchos findes así :-)
jo, yo también estoy hecha polvo, y con una mala leche en lo alto!!!!
Hola guapo!!!
Creo que tienes que acertar cuántos son 2+2 para dejarme algún comentario... Jajaja es broma.
Vaya finde que te has pegado!!! Ten cuidadito que ya no estamos pa esos trotes...
Un besito
Veo que ha sido un fin de semana provechoso! Estos son los que, pese al cansacio posterior, no deben dejarse de hacer de vez en cuando: la rutina es muy mala para el cuerpo!!! I la mente!
De todos modos, espero que en el próximo no tengas que decir que tienes el honor manchado.
Y para todas las personas que sienten que tienen el honor manchado: pensad que detrás de cada noche viene una aurora que nos sonríe.
Publicar un comentario