Semana cultural: Teatro
Lo hubiera entendido si fuera Tako pero, claro, él se ha pillado el taller molón (y encima no se gastará un pela, el muy catalán, ya que es preestreno) de la Semana Cultural y nosotros repartimos con lo demás.
Yo propuse un taller sobre malas artes pero elgilipollas simpático de Rosebud estuvo en contra: “ves a ver teatro y, por una, vez habla de buenas artes”. Mirando la cartelera sólo hubo una opción.
Chip que, a los dos minutos de la obra, desapareció... aunque el guión posee algún momento de humor (sobretodo en el personaje de Vicky). Sònia, la policia, y Mireia, una de las tres hermanas, inician la obra con una puesta en situación pelin lenta pero efectiva.
Pero los personajes estrella son, para mi, Lola y Candela (sin spoilers) que, en nada, ponen el climax. Paralelamente transcurre la historia de Lidia, que va cambiando según evoluciona el misterio de la obra.
Sería fácil hablar sólo de la escenografía, por los cambios, por la buena situación y, sobretodo, por la capacidad de las actrices de jugar con él.
Pero parece que hablar así implica que una obra es menos buena. Pues no. Todas están genial, desde los papeles que quedan menores en comparación de Sònia, Lidia y Vicky a los que son más potentes: Mireia, Candela y Lola.
El guión está bien aunque peca de algún deusexmachina y alguna de las relaciones entre personajes griñola (sobretodo entre Lidia i Sònia). La obra rompe con el clásico de las T y las sitúa en una obra más seria y ellas se la meriendan.
Un obra para ver y disfrutar. Una buena recomendación en esta semana cultural.
Yo propuse un taller sobre malas artes pero el
Ir a una obra representada por mujeres... motivos obvios.
Chip que, a los dos minutos de la obra, desapareció... aunque el guión posee algún momento de humor (sobretodo en el personaje de Vicky). Sònia, la policia, y Mireia, una de las tres hermanas, inician la obra con una puesta en situación pelin lenta pero efectiva.
Pero los personajes estrella son, para mi, Lola y Candela (sin spoilers) que, en nada, ponen el climax. Paralelamente transcurre la historia de Lidia, que va cambiando según evoluciona el misterio de la obra.
Sería fácil hablar sólo de la escenografía, por los cambios, por la buena situación y, sobretodo, por la capacidad de las actrices de jugar con él.
Pero parece que hablar así implica que una obra es menos buena. Pues no. Todas están genial, desde los papeles que quedan menores en comparación de Sònia, Lidia y Vicky a los que son más potentes: Mireia, Candela y Lola.
El guión está bien aunque peca de algún deusexmachina y alguna de las relaciones entre personajes griñola (sobretodo entre Lidia i Sònia). La obra rompe con el clásico de las T y las sitúa en una obra más seria y ellas se la meriendan.
Un obra para ver y disfrutar. Una buena recomendación en esta semana cultural.
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