Nit màgica (noche mágica)

Entrada automática que se supone que se publicará sola ¿? a las doce. Esta historia hace tres Sanjoanes que estaba escrita... Otro día grabo la música y el texto al mismo tiempo. En caso de que no funcione la canción de ambiente está aquí.



Cae el sol.

Reina la noche.

Un ejército de nagas emerge por la costa negra.

En el silencio se puede oír el roce de las colas en la arena. El pueblo naga nunca ha sido famoso por su buen humor y hoy parece especialmente enfadado, no por tener que arrastrar al Buque Fantasma, no por tener que aguantar a Poseidón y Electra, no por los cantos de sirenas y pléyades. Odian la tierra, odian a los humanos y aún esperan vengarse de ellos, odian hacer de niñeras de espumeros, ventolines o nuberos y, sobretodo, odian a quién ha provocado todo esto…

- Itditssssssssa

Iditxa está más contento que nunca, si eso es posible. Ha trabajado mucho para esta noche y quiere disfrutarla. En un guiño se convierte en un lobo blanco que rompe la oscuridad con su velocidad. El viento suena a risa cuando Iditxa ve a su compañero de aventuras salir del portal feérico.

Oberon, Titania y su séquito vuelven a nuestro mundo, guiados por Puck. Los elfos, duendes y las hadas muestran sin reservas sus caras de asco al ver como, desde que se fueron, la madre naturaleza ha sido violada, sin piedad, por los humanos.

La Dama de Amboto grita enfadada ante la visión de su siguiente paso en el camino. Los fuegos fatuos no se atreven ni a mirar el Mar de las lágrimas. Las salamandras, liminiades y basiliscos sisean enfadados… si al menos tuvieran los dragones.

Iditxa se imagina el camino de cada uno de ellos y su risa aumenta. Él mismo, pese a conocer los secretos de la ruta, se ve obligado a pasar alguna de las pruebas extra que han puesto sus aliados.

Odian fiarse de él pero es quién más conoce a los humanos. Brahmā mismo tuvo que convencer a Odin para que le soltara. Observado en cada paso por su padre y su hermano, Loki disfruta de su excursión brindando con Baco mientras ve que el problema de los dioses sigue siendo ellos mismos.

Demasiado confiados en sus posibilidades los elementales de viento se preguntan cómo pasar por el vacío. Observan como sus compañeros de tierra no se atreven a entrar en el Volcán del fín. Deciden ayudarlos y los elevan sobre el magma.

Las doce pasadas e Iditxa llega resoplando. Se sorprende al ver las luces encendidas y una voz que dice.

- Llegas tarde… Te estaba esperando.

Miles de centauros cabalgan mientras compiten con unicornios, pegasos, dragones y manticoras. Su objetivo no es ganar, sólo quieren bajar a sus jinetes. Brujas y magos usan todas sus artes para permanecer en sus monturas. Saben que esta su única manera pero dudan en llegar de una pieza.

Rompiendo una pared entran golems, siseando de odio les siguen las nagas con las armas dispuestas, bolas de fuego vuelan en dirección a Iditxa. El tiempo se para pero todos siguen moviéndose. Viejos enemigos se unen en contra el objetivo común pero una fuerza les detiene a todos. Una fuerza que se ríe y dice:

- Bienvenidos... disfrutar de la fiesta.