Clases de protocolo XIII

Queridos lectores que aún entráis a Takolandia (gracias, gracias) a leer las cosas de NOCH (próximo título a otra sección que aguantará durante unos 10 minutos o menos) a todos nos ha pasado que tenemos que cambiar de empresa en algunos momentos de nuestras vidas (léase trabajo nuevo, lugar distinto o compañeros que se fugan) o que a nuestro lugar de trabajo viene una chica (un chico) nueva (nuevo) a la oficina (oficino) o que estás en la misma empresa pero es diferente empresa pero es la misma empresa pero es diferente empresa pero es la misma… bueno, ya me entiendes… es por eso que, en esta cuna del buen hacer que son las clases de protocolo…

Hoy: Empresa nueva, vida nueva.

Todas las cosas que podemos decir son superfluas si tenemos en cuenta al ABC (joder que mal rollo) de cualquier lugar nuevo: conoce sus bares. Esa es la prioridad. Si hace falta ves durante una semana cada día para hacer un estudio sobre bares. Usa toda tu energía en ser amable con los camareros. Una vez conseguido eso… todo lo demás es pan comido.

- Lo más importante es la primera impresión así, que por una vez, aféitate como es debido (sí, ya se que yo llevo barba), ponte un traje (sí, se que no tengo traje pero cuando combino según que pantalón con según que americana da mucho el pego), se simpático (¿borde, yo?), y recuerda el lema “sí a todo” (estamos en crisis hermanos, el sí es absoluto).

- Una vez has conocido la nueva empresa es importante convencer a alguien que te de un encargo/curro/misión y entonces CAGALA. Pífiala, equivócate, yérrala (por favor, como me pone esta conjugación, todo este post merece la pena sólo por escribirla)... esto es FU-DA-M-E-N-TA-L así jamás te volverán a dar ningún trabajo (tampoco hace falta que lo destroces mucho… a ver si te van a dar de patitas a la calle).

- Queda con un amigo para que te llame un mínimo de 7 veces y tu respóndele cómo si fuera un entrevistador (“¡cobrar 34254356 euros!.... si, me interesa”) así tu caché subirá.

- Queda con otro amigo (el de más morro) que se meta en tu curro y se presente como el presidente/jefe máximo/dios de la empresa. Nadie le conocerá… nadie EXCEPTO tú. A partir de ahí tu vida será más fácil.

- Prepara respuestas obvias que indiquen tu sabiduría absoluta sobre TODO. ¿Algunos ejemplos?

- Parece que hoy no quiere salir el sol,
- Perdonaaaaaa (el tono es importante) pero el sol sale siempre… son las nubes que no te lo dejan ver.

- ¿Cómo vamos a realizar todo lo planeado?.
- Deberíamos reformular el concepto/la base/el objetivo (¡¡oh!! ¡como triunfa el mundo de las frases que no dicen nada!).

- Evita las risas si alguien, en una reunión, habla de OR-GA-NI-Z-A-C-I-O-N (alguien tendrá que analizar el daño que ha hecho ese chiste)... al menos no seas el primero en reír.

- IMPORTANTE: Para que te explique el trabajo, los procedimientos y demás... busca un fumador complusivo... eso te asegurará que cada media hora tengas 10 minutos de descanso y ese será tu nuevo horario.

- Delega. ¿Qué? Ya se que eres el nuevo. ¿Y? DELEGA.

- El primer día de trabajo lleva un chaqueta nueva de color cantón (amarillo pollo, rojo chillón o rosa chicle) y asegúrate que todos la vean. Entonces ves a tu mesa deja el ordenador encendido con un trabajo a medio escribir y un montón de papeles esparcidos y PON LA CHAQUETA EN LA SILLA. A partir de ahí te puedes escaquear sin miedo, todos pensarán que estás por ahí. Por cierto esto es válido aunque sea verano.