¡Hostia! (me temo que aquí todo el mundo va a empezar sus comentarios con un exabrupto, pero es que la cosa tiene tela)
A ver. Pensemos. Es un anuncio. Los anuncios cuidan todos los detalles. Luego la correa de perro y la argolla en el cuello de la chica no pueden ser casualidad, ni despiste, ni pura cuestión estética.
¿Entonces? ¿Doble mensaje rayando en la más pura esquizofrenia, usease, no te dejes maltratar pero sométete al amo? ¿¿¿??? Demasiado perverso para ser cierto, ¿no? ¿Una conspiración masculina detrás de la campaña para evitar no sólo los efectos deseados sino para reforzar la actitud sumisa de la mujer ante el maltrato? Dios! ¡Los hombres no podéis ser tan malos!
¿O, entonces, todo lo contrario: sé dueña de ti misma, ponte tú solita la correa y sácate a pasear?
Ay, Tako, si no te fijaras en tales pequeñeces vivirías mucho mejor. La ignorancia es la felicidad :P
Yo también te sigo... estoy tomando apuntes por si alguna vez me caso. :-)
Besos.
Antígona
¡¡Desde luego la ignorancia es la felicidad!!
Me encanta que en tu respuesta resumas todas las ideas (alguna más salío) que tuvimos los que discutimos el anuncio. Nuestra votación fue que:
1.- No era casualidad. 2.- En verdad era un doble sentido peyorativo.
Pero bueno... ya sabes que siempre podemos cambiar de opinión. :P
Besos.
Querida
Buf, las modas!! No las seguí nunca y ahora me parecen ya absurdas. Pero, querida, es que hay modas y modas. Recuerda alguna como la de los calcetines blancos con zapatos negros..
Buenoooo, veo una segunda lectura muy erotómana; pero tu educado público lector no merece escandalizarse con una mis esquizofrénicas tergiversaciones... ¿Oiste hablar del carrete filipino?
5 comentarios:
Oño! No me había fijado. ¡Qué fuerte me parece! Tako siempre atento a los detalles...
Por cierto, te sigo leyendo, aunque pocas veces me anime a dejarte un comentario ;)
¡Hostia! (me temo que aquí todo el mundo va a empezar sus comentarios con un exabrupto, pero es que la cosa tiene tela)
A ver. Pensemos. Es un anuncio. Los anuncios cuidan todos los detalles. Luego la correa de perro y la argolla en el cuello de la chica no pueden ser casualidad, ni despiste, ni pura cuestión estética.
¿Entonces? ¿Doble mensaje rayando en la más pura esquizofrenia, usease, no te dejes maltratar pero sométete al amo? ¿¿¿??? Demasiado perverso para ser cierto, ¿no? ¿Una conspiración masculina detrás de la campaña para evitar no sólo los efectos deseados sino para reforzar la actitud sumisa de la mujer ante el maltrato? Dios! ¡Los hombres no podéis ser tan malos!
¿O, entonces, todo lo contrario: sé dueña de ti misma, ponte tú solita la correa y sácate a pasear?
Ay, Tako, si no te fijaras en tales pequeñeces vivirías mucho mejor. La ignorancia es la felicidad :P
¡Un gran beso, ojo de lince!
Pues muy fuerte. Las modas son absurdas ahora y siempre.
Pimkie
Yo también te sigo... estoy tomando apuntes por si alguna vez me caso. :-)
Besos.
Antígona
¡¡Desde luego la ignorancia es la felicidad!!
Me encanta que en tu respuesta resumas todas las ideas (alguna más salío) que tuvimos los que discutimos el anuncio. Nuestra votación fue que:
1.- No era casualidad.
2.- En verdad era un doble sentido peyorativo.
Pero bueno... ya sabes que siempre podemos cambiar de opinión. :P
Besos.
Querida
Buf, las modas!! No las seguí nunca y ahora me parecen ya absurdas. Pero, querida, es que hay modas y modas. Recuerda alguna como la de los calcetines blancos con zapatos negros..
Besos
Buenoooo, veo una segunda lectura muy erotómana; pero tu educado público lector no merece escandalizarse con una mis esquizofrénicas tergiversaciones... ¿Oiste hablar del carrete filipino?
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